No sé que estúpido pudor te dejó en sombras, incluso después de que partieras...
Sí sé; fue lo mismo que ahora siento, esta rigidez que escribe y borra, y que hoy es parte de mi cuerpo.
Paradojas de saber y no saber, de escribir la fluidez y negarte en todas mis mareas.
Pues bien, ahora mismo comienzo a desertar de la idea fija. Esa contradicción que no me ha dejado agradecerte el blog pero tampoco continuarlo a partir de la última mariposa que hemos visto.